miércoles, febrero 15, 2006

Coming From The Cold

Ayer a la tarde, después de trabajar, salí a correr. Me encontré con un conocido que quería salir a correr conmigo. Arrancamos y en la primera vuelta, conocido se encontró a una conocida suya. Conocido paró a saludar. Yo no paré, seguí a mi ritmo. Corrí bastante, hacía calor. Cuando terminé, esperé un rato a conocido, no aparecía, monté mi bólido y partí.

En casa tomé un poco de agua (natural). Cambiaron el automático de la heladera y sigue andando mal. "Es muy vieja, el motor empieza a fallar".

Hambre. Camino a un kiosko, ganas de panchos. No tienen, voy a otro, no trabajo panchos, me dice. Al final, supermercado, bifes y baguet.

El humo, importante. El olor también. Abro ventanas, prendo ventilador.

Ducha.

Pedaleo a una pizzería a encontrame con amigos. Uno acaba de llegar del exterior. En la mesa converso con un niño. Le digo que un día podemos dar una vuelta en mi bicicleta. "Tiene dos asientos?", me pregunta el niño.

En casa, cama y de nuevo mosquitos. No compré pastillas, revuelvo cajones en busca de espirales, no encuentro. Mato un par revoleando un almohadón y antes de dormir pienso.

Pienso en la heladera. En cómo mantiene las cosas guardadas, a salvo. También en cuando algo se pudre adentro; el proceso de descomposición se alarga. Tal vez, en este caso, mejor estar afuera, al natural.



Atte.

3 Comments:

Blogger Loli said...

hay que hablar con niños más seguido.

Bueno, ahora tiene un sobrino, Obelix. Aproveche y converse.

febrero 15, 2006 12:13 p. m.  
Blogger Satamarina said...

me gustó

febrero 15, 2006 6:05 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Muñe: mañana en el fútbol, llevame los cds del surfer que me los olvidé en tu cartera! Grazzie.

febrero 15, 2006 6:10 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home